La oposición cipaya venezolana... Un asunto de salud pública...

Por María Antonieta Guevara Rengel
(14.9.05)

Este insólito grupúsculo denominado “oposición” es realmente un caso de estudio profundo y exhaustivo en el campo del psicoanálisis y la psiquiatría. Un verdadero desafío para el mejor ramillete de especialistas en enfermedades de la mente que pudiera reunirse. Es absolutamente inconcebible la disociación que esta gente está sufriendo y no ha “parado de sufrir”, desde que el Presidente Hugo Chávez Frías asumiera su mandato constitucional, luego ratificado en Referendo Consultivo, contemplado en la Carta Magna, con el mayor porcentaje de votación obtenido por presidente alguno.

Estos míseros personajes, vasallos del imperio de los Estados Unidos de Norteamérica, no han dejado de inocular veneno al pueblo venezolano durante 6 años, las 24 horas del día, utilizando para ello todos los medios masivos de comunicación, escrita, televisiva y radio eléctrica por todo el territorio nacional y más allá de sus fronteras, porque también tenemos corporaciones televisivas y radiales en ese país del norte, de costa a costa, cartelizados, se han dado a la tarea grosera de inocular veneno, haciendo gala de total desconocimiento de la realidad venezolana, al punto que, hasta un predicador televisivo mandó a asesinar al Presidente Chávez, retractándose luego, pero de la manera más infantil... ¡no! Yo no quise decir eso...lo que quise decir fue que se secuestrara. Además de asesino, necio el predicadorcito. Remató la faena enviando luego una carta de “excusa” al Presidente. No creo que el presidente use tal clase de papel para esos menesteres habiéndolos perfumados y suaves, debe haber terminado el cartita para recibir la caca de algún perrito callejero.

Ahora estos muppets deben estar “bailando en una pata”, dicho en lenguaje coloquial. El Presidente Chávez parece que asistirá a la LX Asamblea de la ONU, no obstante la negativa de la embajada de los USA de otorgar la visa a todo el Personal de Seguridad, Jefe de la Casa Militar y personal de médicos del Presidente, ¡ah!, no es todo... ¿y el avión?, lo mandaron -bien lejos- a un sitio donde no existe seguridad alguna. ¿Tanto miedo les imprime el Presidente Chávez o es sólo un pase de factura para un presidente que se ha negado a ser genuflexo ante el imperio? ¿Qué pretenden? ¿Dejarlo a merced de que cualquier Orlando Urdaneta, -léase loquito, pues al original le faltan de “aquellas” que vienen en pares- lo “encuentre en el camino”, en el sitio y hora adecuados para acabar con su vida?

Muy mal queda el imperio ante el mundo por sus tropelías vergonzosas de todos los días. Vergüenza de un país que se jacta de la democracia más perfecta. Pero como nada es perfecto, además de múltiples fallas que ponen en evidencia el trasto que tienen por democracia, también tienen un presidente que no ganó las elecciones en su primer período, que arrebató la presidencia y luego, para las siguientes elecciones, asustó a un pueblo, que está grotescamente desinformado, mostró un vídeo de un supuesto Ben Laden amenazando al país, para ganar el segundo período, -un período que pasará a la historia como el del miedo y la agresión-, con un porcentaje nunca visto en la historia de esa “democracia”.

No obstante los múltiples, prolongados y permanentes ataques de artillería que a diario sufre, aguanta y resiste el pueblo venezolano, desvirtuando el objeto de las Misiones, atacando con furia, basura y mentiras la Misión Mercal, por ser ésta la más emblemática, ya que nació producto del criminal sabotaje petrolero y los alimentos acaparados en manos de los cipayos apátridas, con argumentos como: que los alimentos no cumplen con los requisitos mínimos exigidos para la nutrición; burlándose sarcásticamente de los empaques por llevar inscritos fragmentos de la Carta Magna y mil cochinadas más, el pueblo sigue confiando en la revolución y en su presidente.

Estos sujetos mienten en todos los ámbitos y de todo cuanto el gobierno hace ensañándose en la figura del Presidente, todo es poco, ningún insulto, calumnia o vilipendio les es ajeno, todo es malo para ellos. Todos los convenios firmados, especialmente los petroleros, gasíferos, acuíferos y demás convenios que Venezuela ha firmado con países del Área, del Caribe y hasta con aquellos más distantes como los países asiáticos, todos son regalos del presidente incapaz de controlar su manirrotismo. En nada ven una virtud. Estos tristes cipayos, con el mayor desparpajo y sin la menor vergüenza, calumnian, mienten, desvirtúan, sacan de contexto el contenido de los convenios y los acomodan a su antojo y complacencia, pero fallan, se equivocan con el pueblo.

Hoy, lo que los tiene más descalabrados es la UNIÓN que se vio ayer 13 en el Teatro Teresa Carreño, de los 167 nuevos candidatos del Bloque del Cambio para las próximas elecciones Parlamentarias del próximo 4 de diciembre de 2005, quienes fueron juramentados por el propio Presidente de la República, y les ordenó que la BUROCRACIA, LA CORRUPCIÓN Y LA CHISMOGRAFÍA INFANTIL entre nosotros mismos, fueran erradicadas de una vez y para siempre. Esperaban un desastre los cipayos, trabajaron con ahínco promoviendo la división y el personalismo y... ¡Volvieron a fracasar!.

Grave y seria la misión que lleva este nutrido grupo de futuros legisladores, donde encontramos representantes de cualquier nivel intelectual y cultural así como una cuota importante de representantes de las etnias indígenas y afrodescendientes. Nada más revolucionario y justo qué, siendo Venezuela un país multirracial y pluricultural esta diversidad se manifieste en la Asamblea Nacional. No en vano en ella se expresa, -ahora sí, eso es revolución- la totalidad del pueblo venezolano.

Esta será la paliza más vergonzosa que oposición alguna pueda llevar, ni aún con todos los intentos de inoculación venenosa, regalos, ofrendas, dádivas graciosas y ofrecimientos descabellados, no lograron llegar al pueblo llano y sacar al Presidente del corazón de los venezolanos.

...Finalmente ...Nada de chavismo “light” o chavismo sin Chávez. Chávez es el líder de este proceso camino al SOCIALISMO DEL SIGLO XXI, y como tal, no tiene vuelta atrás...