Portada del sitio > 8 de octubre de 1967 imágenes finales del Che (videos)

8 de octubre de 1967 imágenes finales del Che (videos)

par Mario Pacho O’Donnell *

Publie le Martes 8 de octubre de 2013 par Mario Pacho O’Donnell * - Open-Publishing

El escritor Pacho O’Donnell explica el origen de estas fotos de gran valor historiográfico, que estaban en poder de un militar boliviano desde 1967.

El 8 de octubre de 1967 Ernesto El Che Guevara es herido y apresado por los rangers bolivianos entrenados por los boinas verdes norteamericanos. El capitán Gary Prado, el jefe del batallón, lo conduce hasta el pequeño poblado de La Higuera, donde es encerrado en su escuelita, junto con Willy Cuba, un valiente guerrillero boliviano que prefirió permanecer junto a El Che en vez de intentar el escape. No tardará en llegar la orden de La Paz: El Che debe ser asesinado. Quien se encargará de dicha tarea es el sargento Mario Terán, elegido al azar por el coronel Zenteno entre los siete suboficiales presentes.

La escuelita. La escuelita.
Ernesto El Che Guevara, herido y apresa
do por rangers bolivianos -que fueron
entrenados por boinas verdes estadounidenses- es llevado al pequeño poblado de La
Higuera, donde es encerrado en su escuelita. Se
lo ve casi de perfil, con las manos atadas.
Faltaba poco para que fuera asesinado, cumpliendo la orden dada por el gobierno de La Paz.
(Clarín. Bs. As. Argentina.)
http://www.clarin.com/diario/2006/
02/05/sociedad/
s-01136272.htm

Federico Arana Serrudo era, en aquel octubre de 1967, Jefe de la G2, Inteligencia Militar del Estado Mayor boliviano. Hace pocos meses se dieron a conocer en Colombia fotografías que estuvieron en su poder a lo largo de los años transcurridos desde la tragedia de La Higuera. Son documentos de inmenso valor historiográfico. Dos de ellas muestran a El Che vivo, dentro de la escuelita. En una de ellas se lo ve casi de perfil sentado con las manos atadas.

La otra nos da un impresionantemente nítido primer plano de su rostro que conmueve por la expresión de serena intensidad en quien ya se sabía condenado.

“Cuando el piloto disparó su cámara en ese lugar humildísimo, el ‘Che’, rodeado de
enemigos, en el más absoluto desamparo, herido de bala, habiendo escuchado cómo se
asesinaba al heroico Willie Cuba en la habitación
de al lado, mostró que sí es verdad, como
escribió Sartre, que “la vida no es más que un chispazo entre dos tinieblas”. El único
sentido de la misma es lograr que ese chispazo se vuelva una llamarada que perdure en las
retinas de las mujeres y los hombres de buena voluntad, cualquiera sea su ideología”.
(Fotografía y texto tomado del Diario El Comercio. 13 abril 2006).
http://www.elcomercio.com/noticia.asp?seccion=5&id=36164

Otras tres fotos lo muestran desangrándose sobre el piso, pocos segundos después de su muerte, junto a uniformados con fusiles en sus manos. Una de ellas parecería reflejar el momento del tiro de gracia, quizás a cargo de Terán, su verdugo.

Otra de las fotos que en un dramático primer plano refleja la expresión de Guevara luego de ser ametrallado nos interroga acerca de su milagrosa conversión en el maravilloso rostro del Cristo yacente en la lavandería de Vallegrande.

Es muy interesante también aquella en la que aparece sobre una camilla con los ojos cerrados, confirmando que fue el viento del trecho aéreo entre La Higuera y Vallegrande quien se los abrió y fijó esa mirada que inmortalizó el fotógrafo Freddy Alborta. Por fin está también documentado el cadáver de Guevara atado al patín del helicóptero.

Verdugos.
Guevara, desangrándose sobre el piso, segundos después de haber sido
ametrallado. En la foto aparec
en dos uniformados, con fusiles en las manos. Parecieran
reflejar el momento del tiro de gracia, quizá
a cargo del sargento Mario Terán, su verdugo,
quien fue elegido al azar entre siete suboficiales. (Clarín)
http://www.clarin.com/diario/2006/
02/05/sociedad/
s-01136272.htm
El cadáver.
Otro soldado observa y toca el cadáver de El Che. Su cuerpo, tirado en el piso,
está bajo una inmensa mancha de sangre. Algunas de estas fotos fueron tomadas por el
piloto del helicóptero que transportó a integran
tes del grupo que participó de la muerte de
Ernesto Guevara. Entre ellos, el agente de la
CIA, Félix Rodríguez, quien decía ser capitán
del ejército boliviano. (Clarín. Bs. As.)

¿Cómo llegaron dichas fotos a poder de Arana? En el helicóptero que se dirigió desde Vallegrande hacia La Higuera para transportar muertos y heridos en la postrer batalla del Churo sólo cabían dos personas. El coronel Joaquín Centeno Anaya, Comandante de la 8ª. División, decidió dejar en tierra al Jefe de Inteligencia de su división, el coronel Arnado Saucedo Parada, y en su lugar embarcó al agente de la CIA, Félix Rodríguez, escudado en la falsa identidad de capitán del ejército boliviano Félix Ramos quien tendría una activa participación en la muerte del revolucionario argentino. Saucedo encarga entonces al piloto, mayor Niño de Guzmán, que tome fotos de El Che vivo y para eso le entrega su cámara. En su libro Shadow Warrior (Guerrero de la sombra) Rodríguez contará que abrió al máximo el objetivo de dicha cámara para velar sus fotos y para que fueran sólo las suyas, es decir las de la CIA, las que dieran cuenta de lo que allí sucedía.

Ojos abiertos.
Primer plano del revolucionario argentin
o ya muerto. Tiene los ojos abiertos.
¿Por qué? Dicen que fue el viento del tramo aéreo entre La Higuera y Valle Grande el que se
los abrió. Esta mirada fue inmortalizada por el fotógrafo Freddy Alborta (Clarín)

Pero el piloto llevaba consigo una cámara personal con la que tomó algunas fotografías, que son las que hoy reproducimos. Advertido, Félix Rodríguez exige al coronel Centeno que decomise dicho material. Siguiendo la línea jerárquica el rollo sin revelar va a parar al general Ovando, Comandante en Jefe del Ejército boliviano, quien luego lo depositará en las oficinas de Arana
Serrudo en La Paz.

Ojos cerrados.
El Che Guevara aparece sobre una camilla
, con los ojos cerrados. La foto es
previa a la que se lo muestra con los ojos abiertos, producto del viento durante un
transporte en helicóptero. Todas estas fotogr
afías estuvieron en poder de Federico Arana
Serrudo, Jefe de la G2 Inteligencia del Estado
Mayor boliviano. Las tuvo desde 1967, año de
la muerte de Guevara en la escuelita de La Higuera. (Clarín)
El helicóptero
. El cuerpo de Guevara, atado al patín
del helicóptero. Voló de La Higuera a
Vallegrande. (Clarín)

* El autor: Mario Pacho O’Donnell nació en Buenos Aires y antes de dedicarse a la investigación histórica terminó la carrera de Medicina, donde se especializó en psiquiatría y psicoanálisis. Luego, se dejó ganar por su pasión por la historia argentina, área en la que se dedicó a iluminar los aspectos desconocidos o escondidos bajo la alfombra por los autores de nuestra historia oficial. Así, publicó una serie de best sellers sobre el tema – El grito sagrado y El águila guerrera, por caso– y biografías de Juana Azurduy y Juan Manuel de Rosas. Su última obra en este género fue Che, la vida por un mundo mejor,investigación en la que se basó el documental Che, el hombre, el final . En su paso por la función pública, O’Donnel fue Secretario de Cultura porteño y de la Nación, senador nacional y embajador en Panamá y Bolivia.

Simone de Beauvoir, Sartre y el Che en La Habana
(Tomada de Internet)

“Lo Terrible se aprende enseguida y lo hermoso nos cuesta la vida” (Silvio Rodríguez)